Construido en 1553 por orden del emperador Carlos V, el puente cruza el río Imera Meridional (también conocido como Salso) y toma su nombre del cercano monte Capodarso. Originalmente diseñado como un solo arco de lomo de asno, el puente estaba destinado al paso de peatones y animales de carga. Todavía hoy se distingue el escudo de armas de la familia Moncada. A lo largo de los siglos, el puente sufrió varias modificaciones para adaptarse a las necesidades del tráfico. En 1863, se añadieron dos arcos laterales y se amplió la calzada para permitir el paso de carros. Posteriormente, en 1943, fue dañado durante la retirada de las tropas alemanas y reconstruido al año siguiente. En 1961, una crecida excepcional provocó un nuevo derrumbe, pero el puente fue reabierto al tráfico en 1962.
Hoy en día, el Puente de Capodarso forma parte integral de la Reserva Natural Orientada Monte Capodarso y Valle del Imera Meridional, un área protegida que ofrece numerosos senderos de excursionismo en plena naturaleza salvaje y virgen. La reserva alberga una rica biodiversidad, con flora y fauna típicas de la región, y representa un importante patrimonio histórico y cultural de Sicilia.