Se llega a Petra recorriendo hasta el final la Viale Belvedere. Es uno de los miradores más hermosos de Delia, ya que ofrece una vista panorámica de 360°. Mirando de oeste a norte, en sentido antihorario, se pueden ver parte de Canicattì, el castillo de Delia con, al fondo, Naro y su castillo, el mar de Licata, Campobello di Licata, Ravanusa, Riesi, Sommatino, el Monte Formaggio y, en los días despejados, el Etna y, hacia el norte, las montañas Sicanas.
El lugar se enriquece con un mirador equipado con bancos y papeleras, y junto a él se alza la pequeña y antigua iglesia del siglo XVIII de Monserrato. Al otro lado de la carretera destaca la cisterna de agua de principios del siglo XX, que llevó por primera vez agua potable a las casas de los habitantes de Delia, proveniente inicialmente del cercano manantial de Fontana Bianca y ahora de pozos locales y del embalse de Fanaco, que aún abastece al pueblo con su torre piezométrica.