En 2022, Pierfrancesco Fazio realizó la cinta cromática de la avenida Luigi La Verde (16 × 2 m), iluminada con luces LED, donde reafirma la alegría y la ligereza de la infancia: los molinos de viento simbolizan la fantasía y el deseo de vivir en un mundo incontaminado, con el mar y el viento como únicas fuentes de energía.
Totò Montebello, en su tríptico La Naturaleza en el Corazón, pintado en los muros de la báscula pública de Largo Canale, representa los productos típicos locales - almendras, aceitunas y trigo - reinterpretados a la luz de la memoria, uniendo espigas doradas con códigos de barras futuristas para recordar que tradición e innovación pueden convivir. Con esta obra, el artista conecta la Plaza Madrice con el Monumento a los Emigrantes y el Castillo árabe-normando, entrelazando arte callejero, historia feudal y sabores del territorio.
Con motivo del 150º aniversario de la unificación italiana, en el salón de plenos, los alumnos de la escuela local, guiados por el artista Salvatore Salamone, unieron la historia local con los acontecimientos nacionales del Risorgimento, demostrando cómo la primera pincelada de la calle A. Díaz sigue inspirando a las nuevas generaciones.
En Delia, el color se convierte en memoria compartida y orgullo local, transformando simples muros en narraciones eternas.